Navidades sabrosas pero sin más excesos de la cuenta
Aceptamos que las Fiestas de Navidad incluyen algunos excesos en la dieta, pero hasta cierto punto. No es cuestión de privarse de los platos más ricos del año, pero podemos compensar con raciones medianas y “portándonos bien” en los días no festivos o en las comidas secundarias de los días principales. Sigue nuestros consejos y conseguirás no aumentar tu talla durante estas fiestas.
Haz las 5 comidas
Durante las Navidades, las comidas son más consistentes y eso conlleva no hacer las cinco comidas que se recomiendan al día, las cuales son clave para mantener tu metabolismo activo y el estómago lleno. De esta forma, aunque la cena te encante, podrás controlar la cantidad de alimento que ingieras porque estarás más lleno que si apenas hubieras comido en todo el día. Eso de reservarse para las comilonas, olvídalo.
Excepto los días de celebraciones, evita otras comidas muy pesadas, calóricas o de difícil digestión. Durante todo el período festivo, trata de llevar una alimentación sana y ligera, y así podrás disfrutar de las comidas o cenas obligadas sin que tu línea las sufra en exceso.
Ni refrescos con azúcar ni bebidas con gas
Evita las bebidas que lleven gas porque hincharán tu tripa. Las bebidas con azúcares extras debes dejarlas a un lado y apostar por zumos naturales, aguas e infusiones, hasta los días que sea inevitable consumir un refresco o algo de alcohol. Otro consejo es beber mucha agua para que tu cuerpo purifique una y otra vez. Te ayudará a mantenerte hidratado, a que tu estómago se sienta lleno y a eliminar toxinas.
Muévete y haz ejercicio
Aunque las Navidades sean para descansar, tampoco hay que estar todas las fiestas tumbados en el sofá. Es importante salir a la calle, pasear, caminar, montar en bicicleta o incluso ir al gimnasio. De esta manera, tu cuerpo estará mucho más activo, no dejarás que las grasas se acumulen, y además tendrás mucho mejor ánimo.
Los dulces, guardaditos
Y por último, y el más imprescindible de todos los consejos, es guardar los dulces en un lugar cerrado. Aunque no estén prohibidos, hay que pensar que son el postre de las fiestas, y por eso solo debemos sacarlos en los días señalados, o si tenemos alguna visita. El resto de la semana, turrones, mazapanes y polvorones deben estar bien guardaditos. Si los tenemos a la vista es fácil caer en la tentación de picar en cualquier momento.