Tu perro también necesita protegerse del sol
No solo los humanos necesitamos cuidarnos de los rayos solares. Tu perro también sale a pasear a pleno sol, o incluso puede que te lo lleves a la playa o a la montaña. Toma nota para evitar que su piel sufra quemaduras y otro tipo de complicaciones.
Nada de afeitarlos
Es cierto que el calor del verano puede resultar demasiado intenso para los perros de pelo más largo. No obstante, no conviene que rapéis completamente su pelaje, ya que dejaríais su piel desprotegida y vulnerable a las quemaduras solares. En su lugar, si fuese necesario, podéis vaciar ligeramente la cantidad de pelo con un peine para que estén fresquitos sin aumentar el riesgo de quemaduras.
Crema solar sí, pero no cualquiera
Una de las maneras de proteger a nuestros perros de las quemaduras es aplicarles crema solar. Hoy en día existen cremas solares pensadas específicamente para mascotas, que se pueden adquirir en clínicas veterinarias o centros especializados.
Sin embargo, algunas cremas solares para humanos también pueden servir. En este caso, para evitar intoxicaciones o daños en la piel de nuestras mascotas, las mejores opciones suelen ser las cremas para bebés que sean hipoalergénicas, sin olores, fragancias o coloración de ningún tipo. También debemos fijarnos en que no contengan óxido de zinc ni octyl salicylate, ya que resultan tóxicos para los perros. Cuanto más natural sea la crema, mejor. Y ya sabes que lo mejor es consultar con tu veterinario para asegurar el bienestar de tu peludo.
Cuidado con las zonas con menos pelo
Como hemos dicho, la crema solar puede ayudarnos a prevenir quemaduras en nuestras mascotas. Pero, ¿existen razas y zonas de riesgo? La respuesta es sí. “En los animales de piel clara o despigmentada, pelo corto, zonas con poco pelo o en las que ya hay alguna lesión previa, la acción de la radiación solar puede provocar lesiones.”, nos explica el veterinario Manuel Olivares en su blog. Por ello, es importante que protejamos a nuestras mascotas utilizando alguna crema solar específica para animales que tenga un SPF elevado (SPF 30, como mínimo).
Las zonas a las que debemos prestar especial atención son las puntas de las orejas, el puente de la nariz, la ingle, el interior de las patas y bajo el vientre.
Evitar las horas de más sol
Del mismo modo que a los humanos se nos aconseja no tomar el sol entre las 12 y las 4 de la tarde, lo mismo se puede aplicar a los animales. Evitad que se estiren al sol durante las horas de más calor.
Por otro lado, es inevitable sacar a pasear a nuestros peludos cuando les hace falta, pero tenemos que tener en cuenta que el suelo puede estar extremadamente caliente tras muchas horas tocándole el sol, así que os aconsejamos tratar de caminar siempre por la sombra para evitar que se quemen las patas.
Lo más importante es que tengamos en cuenta que nuestros mejores amigos también necesitan protección y cuidados contra el sol. Con los consejos que os hemos dado, ¡tanto ellos como vosotros podréis disfrutar del mejor verano!