Jugoterapia: inyección de vitaminas, minerales y nutrientes
¿Te cuesta comer las 5 dosis recomendadas diarias de frutas y verduras? Quizás debas apuntarte a la jugoterapia, una tendencia que te anima a consumir de forma diferente y sabrosa estos alimentos indispensables para tu salud y bienestar.
Las frutas y verduras suponen un aporte esencial de vitaminas y minerales, siempre y cuando sean frescas. Cuanto más cocinado o industrializado esté un alimento, más despojado de sus nutrientes estará.
Mediante la ingesta de zumos, se elimina un proceso digestivo: la extracción del líquido de las fibras. Al comer hortalizas y frutas frescas enteras, el cuerpo asimila la fibra y extrae en forma de líquido todos los nutrientes. La licuadora ahorra trabajo al organismo ya que separa el zumo de las fibras. Así, con el consumo de licuados, el cuerpo recibe la máxima cantidad de sustancias nutritivas en pocos minutos. Esto es muy interesante, pero no hay que olvidar que el cuerpo también necesita fibra. Así es que no debemos sustituir con jugos toda la fruta y verdura. O no siempre.
No es lo mismo batir que licuar
Con la batidora, lo que hacemos es un puré de las frutas y verduras, una versión blanda o líquida de las mismas, tal cual. La licuadora separa la fibra y nos da los zumos con el concentrado de vitaminas, minerales y otros nutrientes. Por tanto, hay que tener en cuenta que, por ejemplo, una taza de zumo de zanahoria contiene el equivalente nutritivo de cuatro tazas de zanahoria cruda troceada. En el caso de las frutas, también los jugos nos ofrecen un concentrado de sus azúcares. Por tanto, un abuso de jugos no nos va ayudar necesariamente a adelgazar.
Eso sí, los jugos son un aporte nutritivo inmediato y potente para el cuerpo. Como una inyección directa de vitaminas. Pero para que sea así, hay que tomarlos inmediatamente después de prepararlos.
Con hortalizas
Las hortalizas son más difíciles de digerir cuando se ingieren enteras. Al tomar zumos de hortalizas, el cuerpo recibe casi el 100% de los nutrientes que contienen. Las frutas, por su parte, contienen mucha pectina, que ayuda a la digestión y regula el funcionamiento del organismo. Eso sí, la pectina se absorbe mejor cuando se come la fruta entera. Así que no dejemos de tomar fruta a mordiscos, aunque nos aficionemos a los jugos.
Combinaciones y colores
Si estás empezando, prueba el apio suave, pepino y zanahoria en tus jugos. Sin embargo, te recomendamos que poco a poco vayas incluyendo el jugo de vegetales de hojas verdes, como la lechuga, la col rizada, la espinaca y la col. Los vegetales verdes son más poderosos en nutrientes y en sabor. Mézclalos con las verduras que no son tan fuertes, como el pepino o la zanahoria. Prueba a añadir el jengibre para condimentar y para aportar nutrientes saludables.
También son interesantes las combinaciones por colores. Prueba jugos verdes, con lechugas, escarolas, endibias, acelgas, berros, pepino, apio o espinacas, que combinan muy bien con la manzana. O los de color naranja, a base de zanahorias, tomate, pepino, y calabaza. Y los jugos rojos, con especial protagonismo del tomate y la remolacha, que se pueden mezclar con pepino y limón, o en versión más dulce, con zanahoria.
Y no olvides que la forma más adecuada de tomar los jugos es una hora antes del desayuno o de dos a tres horas después de la comida, nunca junto con las comidas principales. Son un aperitivo o tentempié perfecto.
Más información:
Mitos y verdades de los zumos de frutas y verduras – Artículo de El País
Fuentes de las fotos:
mariamarin.com / eva.hn /1001consejos.com